domingo, 22 de noviembre de 2009

Semana cultural


Ciertamente ha sido una semana interesante, aparte de un talón jodido, el resto ha estado bien, desarrollo de una miniaplicación con QT, python y su maravilloso elixir...con estas herramientas uno le vuelve a coger el gusto a esto de programar...

Pero lo que realmente ha motivado este post ha sido una obra de teatro y un concierto. Tanto una como otra tuvieron lugar en nuestro entrañable teatro circo. La obra de teatro fue el tartufo, de moliere, en la adaptación que ha hecho un grupo de teatro de la tierra, los murcianos alquibla. El montaje me gustó, sencillo, sin alardes. Los actores también cumplieron, destacaría al propio tartufo, pero se lo debe más a la naturaleza de su papel. La que de verdad me gustó fue la sirvienta, estoy seguro que para el papel, la actriz, se ha inspirado en las dos sirvientas de la casa del doctor frank 'n furter de rocky horror picture show. Desvergonzada, liante, con un acento muy acertado, el mérito debe ser repartido a partes iguales entre la actriz y el director.

Me ahorraré comentar el argumento por si alguien no ha visto nunca representada la obra. Creo recordar que en el colegio nos pusieron un estudio 1, con un grandioso agustín gonzález como tartufo. Me pregunto por qué no tuvo éxito la reposición de esta serie de obras de teatro, ciertamente nos hace falta ver mucho de esto y sobre todo de esa calidad. En el teatro es dónde se ve realmente lo que nuestros actores son capaces de hacer.


El otro acontecimento cultural fue la actuación de ryuichi sakamoto, lo poco que había oído de este compositor era la banda sonora del último emperador, ya que tacones lejanos me abstuve de verla...y ahí siguen las películas de almodóvar, en un cajoncito, la imagen de miguel bosé de travelo me decidió a alejarme de su cine y cada intento de volver a verlo ha sido un desastre, es que no lo trago.

Me estoy desviando. En esta serie de conciertos el señor ryuichi se viene sólo con su piano y sobre una base de acompañamiento va desgranando su cálido repertorio. Sazonado con la proyección de unas animaciones sutiles, ya sean estilizadas líneas, formas geoḿetricas simples o imágenes difuminadas que nos susurran ideas que complementan la historia que nos dibujan las notas emitidas por el piano del maestro. Una delicia. Lo curioso es que en el escenario aparecían dos pianos, pero el otro quedó sin utilizar, intuimos que simulando la base musical sobre la que se apoyaba para desarrollar el concierto.

Ryuichi terminó con un bis obligado, la canción principal del último emperador que seguro más de uno reconocería sin dudar. Un concierto impresionante, una auténtica suerte haber asistido, gracias, a los que ya saben.

La semana no terminó muy bien ya que en el cine no estrenaban nada...corrijo, estrenaban la nueva película de sam mendes, pero claro aquí, en la región del monopolio neocine, no había salas disponibles, un asco.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Ultimatum a la tierra


Juego de palabras chorra para mezclar las dos pelis más recientes que he visto. Una que me ha encantado y otra que no tanto. Empezamos por la del viernes, 2012, john cusak en una superproducción hollywoodiense del director de independece day y demás catástrofes. Efectos especiales de una gran factura y un guión un poco más barato. Digamos que dos horas y pico son excesivas para contarnos la hitoria. Como datos positivos podemos decir que sale amanda peet, no tan bien como en otras ocasiones, y que la parte final nos mantiene en vilo hasta llegar al lógico desenlace.

La verdad es que no hay mucho más que decir, efectos especiales buenos, argumento flojo, historias pequeñas para darle algo de consistencia, discurso prohumanidad hacia el final...entretenida y por supuesto, sólo apta para el cine.

Gracias a dios el domingo pude ver una película más interesante. Tenía la trilogía de bourne atrasada desde mi cumpleaños y aprovechando que la pasaban en la primera me la puse en dvd después de comer para poder ver tranquilamente la nfl por la noche, bueno, y para no tragarme los anuncios.

En esta última entrega nuestro agente secreto favorito, bond está muy pasado, intenta recuperar su memoria y el creador del personaje persigue poner la reputación de la cia por los suelos. Si 2012 nos mantenía en tensión durante su desenlace, ésta consigue lo mismo, claro que ocupa el metraje de una película entera. Lo único reprochable es la falta de franka potente...pero está bien suplida por otra heroína que ya se nos presentaba en la segunda entrega de la trilogía.

Los escenarios de ésta última siguen siendo multinacionales, incluso bourne pasa por madrid, por una de las muchas 'sedes' que la cia tiene repartidas por el mundo.

Resumiendo, sobresaliente para matt damon y su agente bourne y peor nota para john cusak y su amiguito roland.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Celda 211


Está claro que para hacer una buena película sólo hace falta una buena historia y un puñado de buenos actores. No caeré en el error de decir que no parece española de lo buena que es, aunque alguna vez me haya salido así en alguna conversación en el fondo no pienso esas cosas sobre nuestro cine.

Centrándonos en la película que nos ocupa, lo que más destacaría es el guión, una historia que nos mantiene en vilo hasta el final, con ritmo y algún que otro giro inesperado. Un funcionario de prisiones envuelto en un motín carcelario el día antes de incorporarse a su trabajo y los malabarismos que tiene que hacer para mezclarse esntre ellos como un preso más parecería suficiente argumento, pero la cosa no se queda ahí ya que unos presos especiales son la baza principal para negociar del líder de los amotinados.

Lo que nos lleva a hablar del otro pilar que sostiene esta gran película, los actores. Un gran luis tosar que hasta fuerza la voz para hacer más auténtico este dirigente del pabellón más peligroso de esta cárcel. El funcionario de prisiones que se encuentra en el peor sitio y en el peor momento, es un actor argentino que promete, habrá que seguirle de aquí en adelante. Si tuviera que ponerle un pero sería el problema que tiene para disimular su acento argentino, aunque sólo se intuye en las escenas en las que tiene que imponerse entre los presos a voz en grito.

Los demás actores cumplen con creces, un tremendo antonio resines, impecable en su papel de funcionario violento, de la vieja escuela, y todos los demás presos, unos secundarios que completan perfectamente el ambiente de traiciones y lealtades que intuimos que se deben extremar en ese tipo de situaciones.

Del director, daniel monzón, diré que debo revisar su anterior película, la caja kovak, otra peli de intriga, para ver si realmente ha evolucionado o "simplemente" tendremos que acostumbrarnos a este nivel.

Una película más que aconsejable, diría incluso imprescindible, con el añadido de que el dinero que recaude, teóricamente, se queda en casa. Como curiosidad debo decir al respecto que los créditos del principio están plagados de instituciones, tanto públicas como privadas que han puesto la financiación para realizar la cinta y parece que más de lo que viene siendo habitual.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Okuribito


Resulta que el año pasado llegué a tiempo de ver todas las pelis importantes de los oscars antes de ver la gala pero la peli extranjera me quedó en el tintero y siendo japonesa ya tiene delito. Pero héte aquí que el cine club hannibal ha venido en mi ayuda, con su versión original y todo.

El argumento de la peli prometía diversión y risas a raudales, un violonchelista en paro, abandonado por su padre a una edad muy temprana, vuelve al pueblo que le vio nacer, a la casa que le dejó su madre, junto con su mujer. En su búsqueda de trabajo contesta a un anuncio en el periódico que resulta ser una empresa que se dedica a los embalsamamientos.

Parece ser que las funerarias japonesas contratan los servicios de estos "intermediarios", que se encargan de preparar el cuerpo para depositarlo en su ataud, para llevarlo posteriormente a la incineradora. Esta costumbre es común a todas las religiones presentes en la sociedad japonesa con lo cuál podemos ver distintas formas de despedir a sus difuntos.

En todas las ceremonias vemos a nuestro protagonista y a su jefe ejecutando de manera impecable los movimientos que componen este rito delante de los altares de recuerdo al difunto, con su foto y multitud de ofrendas. La familia y los más allegados deben contemplar esta ceremonia y a su vez el espectador puede ver diversas reacciones respecto al último adiós a un ser querido.

Es muy curioso ver como se puede enseñar tanto sobre la vida en sí observando una serie de funerales. La película no es triste, al contrario de lo que se podría pensar, nos deja un mensaje muy positivista para nuestras propias vivencias. Cada escena está cargada de sentimientos muy intensos, por supuesto, pero en ningún momento percibí la tristeza propia de unas situaciones así.

Yo destacaría la habilidad del director para contarnos tanto sobre la vida mostrándonos ampliamente lo que rodea a la muerte. Los actores que dan vida a los personajes se merecen otra mención, el protagonista, por supuesto, pero sobre todo su jefe. El que lleva dedicándose a su oficio durante muchos años, con lo que aparentemente debería ser un tipo peculiar, siendo exactamente lo que nos trasnmite el actor que lo interpreta. El resto de personajes están a la altura de las circunstancias.

Como curiosidad, en la película podemos ver unos baños públicos a la antigua usanza, de los que seguro quedan pocos en las grandes ciudades de japón. Todos los que hayáis tenido el placer de ver o leer ranma sabréis reconocer el escenario mostrado en la película.

El oscar a la mejor película de habla no inglesa está más que justificado y la recomiendo encarecidamente.